domingo, 2 de abril de 2017

MedExtrem 2017 | Berndt y Monty

El pasado fin de semana nuestros compañeros Javier y Bernd se fueron a Castellón para participar en la MedExtrem, una marcha cicloturista BTT por etapas de gran fondo de tres días. A juzgar por este reporte, no fue cierto un paseito por el bosque..

Per Monty - Javier Fernandez Montijano 

Cuando elegí la MedExtrem como el reto de Btt de este año pensé: “Castellón……que bien, una ruta con solecito, calor y buen tiempo….”. Nada más lejos de la realidad. Ya en Enero y con la inscripción realizada, me preocupo mucho ver que en Morella había 1 metro de nieve,…..”esto pinta mal en lo que al clima se refiere”.

Dia 1: Castellón - Morella (140km + 3.800m)
La salida a las 6.30h ya hacía presagiar que iba a ser una ruta larga y dura. Con un clima fresco y bien abrigados previendo que nos adentraríamos por la sierra de Les Ports, salimos de Castellón en dirección a Borriol a ritmo sabrosón y, con más prisa que sentido común, el grupo se empieza a estirar como suele ocurrir siempre en estas carreras. Un gringo de Texas (Junior) con una Stumpjumper se nos pega y nos salva con su potente linterna que nos ilumina los primeros kilómetros de ruta, y una sonora Batucada nos alienta en la noche. Va amaneciendo, vamos devorando kilómetros y las vistas de la Peñagolosa desde el Bovalar de Adzaneta, las duras rampas de ascensión a Culla, el parque eólico de Castellfort y el hermoso paraje de Celumbres nos hacen sufrir y disfrutar en la misma medida.
Este es un territorio comanche que me recuerda más a el destrozabicis y machaca cervicales del Garraf que a las “dulces” (no confundir dulces con fáciles) bajadas de Collserola. Los de la organización se toman en serio lo de Extrem y nos mandan por ríos secos en un recorrido sin fin de piedras y cantos rodados donde subir es casi imposible, llanear se vuelve impracticable y bajar un acto de Fe. Un durísimo recorrido hasta las sendas de Morella nos harán sufrir, incluso los últimos 3 o 4 km de subida infernal a la llegada en Morella....”No podían haber puesto el pueblo abajo en el rio”.





Dia 2: Morella – Morella (70km + 2.200m)
Te la venden como la epata de recuperación o transición pero no vas a recuperar el resuello en todo el día y la transición será al hospital para meterte sangre nueva. Para hacer 2.200m en 70km es porque no hay ni 1 metro de plano en toda la ruta y, de nuevo, las piedras como si de una calzada romana se tratara (de hecho estoy seguro que hemos pasado alguna), son la tónica del día poniendo mucha dureza al track. Las subidas a Todoella y La Garumba demuestran una vez más que Collserola y el DRXS son escuela de campeones pues allí adelantamos a mucha gente que no pueden creer que subas a cero pies. Bonitos caminos, bajadas técnicas y un clima frio y nublado son la tónica del día. El punto negro de la organización es la barbaridad que comenten al llevarnos en el kilómetro 15 a un cuello de botella con unos escalones de piedra de 1,5m donde solo se pasa de uno y donde tenemos que esperar más de 30 minutos parados y muertos de frio a que nos toque el turno. Increíble, solo lo disfrutaron los buitres que sobrevolaban nuestras cabezas esperando a ver que se despeñaba primero. 
La llegada a Morella se vuelve más dramática al volver a subir las brutales rampas de acceso al pueblo, con el fuerte granizo que nos empieza a caer como un “regalito” del cielo. Keru debió hablar con St. Pietro pero este no se enteró muy bien de nuestro horario porque una ciclogénesis de viento y granizo se llevó por delante todas las carpas de la organización, hasta el arco de meta salido volando. Creo que todavía lo están buscando.








Dia 3: Morella – Benicasim (138km + 3.800m)
Sin palabras. Ves el perfil de la etapa y piensas “bueno hay bastante llano para soltar....”. Si, si, vas a soltar hasta los higadillos nen....
Aquí vamos a todos los climas y todos los terrenos. Desde la salida en Morella a las 7.00h con un frio que pela (unos 3º), vamos atravesando los términos municipales de Morella, Ares, Catí, Villardecanes, Culla, Albocacer, Sierra Engarcerán, Vall d’Alba,Villafamés, La Pobla Tornesa hasta Benicasim. De alturas superiores a los 1000m a ir bajando hasta el mar por nuevos tramos, como la infernal subida de Mas d’Agut en la Sierra Engarcerán y las espectaculares vistas desde el Mas d’en Coll. La arena de la vía Augusta nos hará sudar antes de cruzar el Desierto de las Palmas. Desde muy, muy lejos ya se ve un pico muy alto y unas antenas arriba y vas pensando....”estos tíos seguro que nos suben por ahí”. Que hemos aprendido en el Keruton: Piensa mal y acertaras: como colofón o guinda del pastel a estos 3 días de histeria colectiva llamada Btt, la organización nos deleita con una maldad digna de cualquiera de nuestros Sherpas....la ascensión al temido y brutal “Bartolo”. Ya crees que sabes lo que te espera pero no tienes ni idea de lo que viene. El 3er avituallamiento en el km 100 es la puerta de acceso al infierno y comienza con unas rampitas preciosas que no te hacen presagiar lo que se avecina. Las rampas se ponen serias, muy serias, cabreadas y de muy mala hostia y de repente....Ufff,....que bien ya llega la bajada. Algo en mi interior me decía “no te lo creas nen, no te lo creas nen, seguro que tiene trampa” (no sé porque pensé esto ya que en el Keruton nadie te engaña con cortes malditos, ni falsos llanos de 18%, ni cargamos la bici al hombro durante largos ratos rodeados de espinas venenosas y caimanes albinos abandonados....). El caso es que mi instinto me sirvió bien y, como suele ocurrir, tras una agradable bajada de 4 min se volvió a encender la caldera del infierno y mis piernas volvían a echar humo. Cuando ves cemento en una subida de montaña mala señal: sube, sube, sube....sufre, sufre, sufre....”esto no se puede poner más empinado”....pues por hablar toma más desnivel....llegando el rampas del 22% o más. Lo peor que puedes hacer es pensar “ya se acaba” porque va a aparecer de la nada otra rampa aún más brutal.....”Pero es que esto no termina nunca”.....pues no y por bocazas curvas de piedras planas del 24%.
Cuando ya crees que has coronado y que estas empezando a bajar, te la clavan por 2ª vez,... giro a la derecha y...”ves esas antenas que tocan el cielo.....waalla...si es mucho más arriba”. Después de acordarte de toda la familia hasta 4ª generación del que diseño el track (y tienes tiempo de sobra para hacerlo), llegas a las antenas con rampas de infarto y un fotógrafo que te dice “venga chaval que ya estas”....”si, si, ya estoy que me”...caigo pensé....
Unas vistas impresionantes nos alegran el calvario sufrido y ver Benicasim nos da fuerza para abordar los últimos kilómetros.
Bajada a saco por la pista que rápidamente se corta pues nos desvían de nuevo a un lecho de un rio (no sé qué fetichismo tendrán estos tíos con los ríos secos y el Btt...) que hace infernal también la bajada. Muy cansado + muchas ganas de llegar + arena suelta + cantos rodados = hostia segura. Estos son, posiblemente, los kilómetros o metros más peligrosos de todos.
Ya llegas Benicasim, ya entras en la civilización, aquí aprietas a saco y gastas los pocos cartuchos que te quedan, la poca glucosa en sangre que tienes. Ver el mar te da alas y vas pasando cruces y rotondas donde la guardia urbana te dirige sin tener que mirar a tu GPS.
Recta final en el paseo marítimo de la playa Torreón donde la gente te anima y confirmas tu sueño...”Ya he llegado”. Una vez más, como me suele ocurrir casi siempre, una mezcla de sentimientos se vuelcan en mi torrente sanguíneo y un crisol de sensaciones me abruman.
Sentimientos, sensaciones, emociones.....¿que tendrá esto del BTT?

Un abrazo.
Monty - Javier Fernandez Montijano



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